Desde hace unos años, todos los días vemos en las noticias, leemos en los periódicos o escuchamos en la radio lo mal que va la economía mundial, los desastrosos niveles de desempleo que hay en determinadas zonas, como España, llegando a puntos casi insostenibles. Tener trabajo se ha convertido en algo prácticamente milagroso, y aquellos que hace cuatro años cobraban mil euros y eran vistos como unos parias son ahora motivo de envidia por parte de muchos que ni siquiera pueden aspirar a un trabajo con ese sueldo. Un trabajo… ¿Nos hemos parado a pensar en todo lo que implica esa palabra?
Si buscamos una definición totalmente teórica, en los primeros lugares nos aparece que trabajo es la ocupación que se ejerce habitualmente a cambio de un salario. Trabajar, ser un profesional, siempre implica el cobro de un sueldo, que nos permite a su vez pagar nuestras facturas, nuestra hipoteca, las letras del coche y los demás gastos que tengamos a lo largo de todo el mes. Ese salario es la base del trabajo. Mano de obra a cambio de dinero, dinero con el que poder comprar o adquirir los bienes y servicios que queremos y necesitamos. Desde pequeños, esta idea se nos inculca a fuego en la mente. Estudiar para estar bien preparados y encontrar un buen empleo para poder vivir cómodamente.
El sistema capitalista que se nos ha impuesto desde mediados del pasado siglo XX ha dado lugar a un tipo de pensamiento que deja el trabajo simplemente como algo necesario para obtener dinero y así acceder a lo que queremos comprar o adquirir. En muchas ocasiones, los trabajos no gustan a los trabajadores, es más, suelen ser un suplicio para ellos. Trabajan sin ganas ni motivación, porque deben hacer algo en la vida y obtener dinero para seguir viviendo en su casa y pagando sus gastos. Gastos que en muchas ocasiones son excesivos y no se corresponden con los ingresos. Esa es la otra parte del sistema, la que nos «obliga» a comprar cosas que supuestamente necesitamos, pero que en su mayoría son solo meros caprichos. Un sistema basado en el consumo y llevado a sus máximos extremos.
Es complicado entender el mundo de otra forma, porque desde pequeños todo nos lleva a este sistema, del que parece que no hay escapatoria. Ser una persona de bien es estudiar, luego trabajar y tener una vida cómoda, con dinero, si no quieres convertirte en un desarrapado, en casi un mendigo, sin casa, sin hogar. El problema es que muchos de los que han seguido el sistema ahora se ven fuera del mismo, por esta crisis que no es otra cosa que la excusa de unos cuantos para enriquecerse aun más a costa del trabajador. Parece que no hay solución. Parece que no hay salida. Pero solo lo parece…
VoluntariadoInternacional.net es un portal dirigido a todos aquellos que buscan una salida distinta a esa vida programada desde el minuto cero, a todos aquellos que piensan que ayudar a los demás puede ser también un modo de vida, que quieren que su trabajo sea reumenerado, pero no exclusivamente con dinero, porque buscan algo más. Este portal está enfocado a todo aquel que quiera cambiar el mundo desde abajo, desde la base, sin grandes campañas ni multitudinarios mítines, sino aportando su granito de arena, por pequeño que sea. Porque grano a grano se hace una montaña.
Si estás pensando en darle un cambio a tu vida, en ayudar a los demás allá donde lo necesiten, en conocer nuevas culturas y países, aprender idiomas o buscar nuevas salidas laborales lejos de tu país, ésta es tu página. Aquí te vamos a recopilar toda la información para que aprendas lo que es el voluntariado, cómo puedes acceder a este tipo de vida, con testimonios, páginas informativas y mucho más. Porque el futuro está por venir, y en tu mano está decidir cómo será.
